El Daiquiri

La combinación de ron y limón era un calmante para la sed de los mambises (libertadores cubanos) en sus campañas contra el ejército colonial español durante la segunda mitad del S.XIX. Esta bebida se llamaba “canchánchara”, y algunos la endulzaban con miel de caña.

A principios del S.XX, el ingeniero Pagliuchi, capitán del ejército libertador, terminada la guerra de independencia de Cuba, visitó en una ocasión una mina llamada Daiquirí, en el oriente del país. Después del trabajo Pagliuchi sugirió tomar algo, pero en la despensa de su colega no había ginebra, ni vermouth, sólo encontraron unos limones, azúcar de caña y ron blanco. Así que lo echaron todo en una coctelera, añadieron hielo picado, lo batieron y sin proponérselo, dieron a luz a la criatura que Pagliuchi bautizó como Daiquiri, que era el nombre de la mina en la que se hallaban.

El cocktail se presentó al público en el bar Americano del Hotel Venus, en Santiago de Cuba y desde entonces gana adeptos día tras día.